14/05/2024
Cada cierto tiempo, el mundo, caprichoso, nos regala personas decoradas de un talento que los aleja de este planeta y sólo algunos tienen el don de saber manejarlo para caminar con las personas a las que quieren.
Los fieles del vino vivimos en la era de Josep Roca. Su voz, nunca en tono elevado, tiene fuerza para mover el mundo de sitio, apoyándose solamente en la palabra.
Nunca pierde la batalla de la generosidad, no debate en conocimiento y siempre aprende de la sensibilidad.
La manera en la que Pitu dibuja las frases permite saborear la belleza que esconden algunas botellas.
Su mano izquierda pinta ilusión en territorios oscurecidos por la tristeza y señala el camino hacia el reencuentro con la alegría.
Su mirada, presente en el futuro, ilumina viñedos que viven a la sombra, llenándolos de la luz qe necesitan para brillar con confianza.
La Sala del Celler de Can Roca es una escuela de magia donde alumnos y profesores crecen bajo el hechizo de la amistad.
Gracias a su equipo por hacerme sentir el Rey de la Baraja.
