24/01/2024
*La empresa a la que se le cayó dos veces el mismo puente*
Para comprender la manera como *Devimar S.A.S* ha enfrentado la contingencia vial en el occidente antioqueño, hagamos un poco de memoria. El consorcio está integrado por tres socios: *Concay S.A.*, con un 25%; *Strabag*, con un 37,5%; y *Sacyr*, con un 37,5%. De las tres compañías Concay S.A. y Sacyr han estado asociadas a descalabros enormes en proyectos de obras públicas en el país.
Empecemos con Concay S.A., compañía colombiana cuyos descaches la preceden. En febrero de 2020, por ejemplo, el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Soacha se dirigía atender el incendio de un hospital en Mesitas del Colegio, al llegar al peaje de la vía no los dejaron pasar porque no tenían cómo pagarlo, desconociendo que por ser un vehículo destinado a prestar un servicio esencial no tenía, por ley, que pagar peajes. El hospital, segun reportaron los bomberos, se quemó. La concesión de esa vía estaba a cargo de Concay S.A. por lo cual la Superintendencia de Transporte les abrió investigación en 2022.
Durante la construcción de la Variante a San Gil, en el departamento de Santander, los reclamos sin atender por la empresa fueron el pan de cada día. Incluso en 2022 *INVÍAS* les impuso una multa de $3.000 millones por incumplimiento en el proceso de construcción de ese proyecto; y en 2023 fueron requeridos por la comunidad aledaña al proyecto Avenida Guayacanes, en Bogotá, por graves averías en sus viviendas. Los requerimientos se dieron justamente porque Concay S.A. no aparecía por ninguna parte.
De otro lado tenemos a Sacyr, empresa española que se ha convertido en un icono de mediocridad en obra pública del país pero que además es reconocida por sus incumplimientos y por los reajustes inesperados de presupuestos en casi todos los países en los que han licitado. En Colombia, solo por mencionar algunos casos, estuvieron entre los constructores de fiascos históricos como el *Puente Chirajara*, en la vía Bogotá-Villavicencio, que colapsó con, entre otras consecuencias, la muerte de nueve obreros. Sacyr también construyó el *Puente de Hisgaura*, en el Santander, estructura que se encogió como un acordeón. La imagen le dio la vuelta al mundo.
Con semejantes antecedentes de las empresas que la conforman, se comprende la desconexión absoluta de la concesión *Devimar S.A.S* con la subregión y sus necesidades. Se comprende que para el fin de semana de Reyes hubieran habilitado el paso por el Puente Amarillo solo porque les convenía a ellos. Se comprende que no respondan derechos de petición sino cuando les da la gana y que no dialoguen con la comunidad ni con la prensa sino cuando les conviene; se comprende que pongan a cuatro obreros a posar como si estuvieran trabajando en la reparación del puente solo para poner un post en Facebook. Y se comprende que vayan a pasar a la historia como la única concesión a la que en un mes se les cayó dos veces el mismo puente.
Por: *Juan Andrés Álvarez Castaño-Periodista*