28/08/2022
El 28 de agosto del 2016 falleció en California, Alberto Aguilera Valadez "Juan Gabriel". Fue el menor de 10 hermanos, Rosa, quién murió casi recién nacida; Victoria, única y consentida hermana; José Guadalupe, Gabriel, Pablo, Miguel (q.e.p.d.), después nacieron tres Rafael y los tres murieron. Cuando nació, una comadre de su mamá, María de Jesús Valverde, sugirió que lo bautizaran como ALBERTO, en honor al personaje de una historia cubana, El derecho de nacer, llamado Albertico Limonta, el cual estaba de moda gracias a la Radionovela de la XEW.
Su padre usualmente quemaba el pastizal para sembrarlo posteriormente, en una ocasión no tuvo control sobre esto, por la preocupación y miedo a lo que vendría por provocar daños en propiedad ajena, se tiró al río, sufrió un shock y enfermó. Por tal motivo le internaron en La Castañeda, de donde no se supo nada más de él. Cuentan que posiblemente escapó. Tenía ocho meses en septiembre de 1950, cuando su madre, al tener problemas con sus cuñadas, se vio en la necesidad de escapar de madrugada rumbo a Apatzingán, de ahí a Morelia y luego a Ciudad Juárez, Chihuahua; en donde le esperaba María Romero Mora, misma que había sido patrona en Parácuaro de doña Brígida Rojas, abuela de JUAN GABRIEL y de su propia madre, y quien les permitió hospedarse en un pequeño cuarto. Ahí no permanecieron mucho tiempo, ya que entre los hijos de ambas existían diferencias.
De los 5 a los 13 años permaneció internado en la Escuela Laica de Mejoramiento Social para Menores, en donde una patrona de su mamá, María de Jesús Mena, le consiguió lugar. Una de sus primeras travesuras fue encerrar a su madre en un cuarto de la casa en donde trabajaba de sirvienta para que no lo llevara de nuevo al internado después de uno de los escasos fines de semana que lo llevaba a pasear. En estas ocasiones acompañaba a su madre a la iglesia, pero las imágenes de los santos lo asustaban por su cara de sufrimiento y dolor. Él siempre ha huido del sufrimiento, del dolor y la soledad. Llegó al quinto año de primaria y lo demás, como él dice, lo fue aprendiendo en “La escuela de la vida”. Siendo niño aprendió hojalatería y elaboración de artesanías, bajo órdenes de don Juan Contreras, de Zacatecas, a quien consideraba su padre, abuelo, consejero, maestro y mejor amigo; en él creía y sólo a él le confiaba la tristeza que sentía por estar alejado de su madre. Padeció de los bronquios, así como una enfermedad llamada ciática
En el internado tenía un compañero que le alquilaba su guitarra, a cambio de 20 centavos diarios. Micaela Alvarado, directora del internado, fue la maestra a quien más quiso y quien más amor le ofreció en su infancia. En el internado aprendió a elaborar pan de sal, de dulce y donas de chocolate.
Cumplió los 13 años, cuando con la ventaja de ser el responsable de tirar la basura, al salir aprovechó la oportunidad para no volver más. Se fue a vivir con don Juan; con él trabajaba y ganaba sus primeros centavos vendiendo artículos de hojalatería creados por sus propias manos. Al cumplir 14 años regresó a vivir con su madre y su hermana quien preparaba burritas de harina para vender. Así fue como conoció el centro de la ciudad.
Pasaba por las calles de La Paz y La Noche Triste cuando escuchó un coro cantando en un Templo Metodista, entró y conoció dos señoras, les contó su historia y le dieron trabajo. Leonor y Beatriz Berumen quienes se lo llevaron a vivir a la calle de Santos Degollado y 16 de Septiembre. Entonces, supo qué era la religión. Se dedicó a limpiar la iglesia, cantar en el coro y leer La Biblia, de la cual aprendía de memoria versículos, mismos que debía leer a los creyentes los domingos. Así, correspondía al gran amor de doña Leonor y “doña Ticho”, como cariñosamente le llamaba a doña Beatriz. Tiempo después, un pastor del Templo Metodista de El Paso, Texas, lo llevó al pueblo de Elsinore, California, para hacer el mismo trabajo. Ahí se quedó seis meses a vivir con una familia de raza negra. Le maravillaban sus voces, su amor a Dios y su fe. Aprendió a amarlos y siempre le llamó la atención que todo lo que hacían era para alabar a Dios.
El hecho de vivir cerca de Tijuana aumentó su curiosidad por conocer y viajar allá. Así lo hizo y en ella formó parte de los Coros de la Catedral de Guadalupe, en donde conoció a su entrañable amigo, don Daniel Díaz, quien lo protegió como un padre. Lo llevó a Rosarito, Ensenada y Mexicali, y justamente ahí es cuando conoce a Monna Bell, su ídolo, en el Marilyn Restaurant Bar. Era noviembre de 1965.
Al mes siguiente, regresó a Ciudad Juárez.
A los 13 años compone La muerte del palomo, a la que siguió Ases y tercia de reyes.
Lágrimas y lluvia, Mis ojos tristes y Amor eterno, misma que dedica a la memoria de su madre fallecida en diciembre de 1974. Vivencias de su hermana Virginia lo inspiraron para componer Se me olvidó otra vez, La diferencia, Veinte años, No lastimes más y Tú sigues siendo el mismo. El recuerdo de su padre lo inspira para crear De sol a sol. De su vida al lado de don Juan nace la canción Eternamente agradecido.
1965 Ciudad Juárez, Chihuahua. Nace interpretando María la bandida del célebre José Alfredo Jiménez en el Programa Noches Rancheras del Canal 5 con Raúl Loya El compadre más padre, quien lo bautiza con su primer nombre artístico: ADÁN LUNA. Sus compañeros de la época: Ana Lilia Arellano, a quien le compuso Ana de mis sueños, tema interpretado por Lorenzo Antonio; María del Carmen, Armando Corona y Miguel Ángel El ojiverde.
1966 al 68. Ciudad Juárez, Chihuahua. Debuta en el Cabaret Noa-Noa, interpretando Adoro de Armando Manzanero, Cenizas, Yo te amo, Yo sé que no es feliz y Harlem en español, entre otros, con el acompañamiento de Los Prisioneros del Ritmo. Simultáneamente se presenta como intérprete en Cucaracha Bar, Palacio Chino, Cucamonga, Boom-Boom, Charlie’s Bar y Hawaiian.
Viaja a la Ciudad de México, recorre todas las compañías de discos sin suerte alguna. Regresa a Ciudad Juárez y obtiene su primer contrato para actuar en el Malibú, recibiendo un salario de diez dólares diarios. En este mismo año conoce a la señora Mc Ulley. 1969. Realiza dos presentaciones diarias, en el Malibú a las 12 horas y en Boom-Boom a las 14:00. Entonces, vivía en un departamento amueblado al fondo del Hotel Ritz.
Heberto Castillo, promotor de la entonces CBS, le motivó a viajar a la Ciudad de México; para que lo hiciera, la Señora Mc Ulley le compró ropa y le prestó dinero. Pero, al llegar a la CBS, le dijeron que ya tenían muchos baladistas en su elenco; lo rechazaron también en Discos Peerless. En RCA Victor el maestro Eduardo Magallanes le aplicó una prueba con la interpretación de Escándalo de la autoría de Rubén Fuentes. Así consiguió empezar a trabajar en la industria discográfica, haciendo coros para grandes figuras de la canción como Roberto Jordán, Angélica María y Estela Núñez; sin embargo, la remuneración era poca y es entonces que decide regresar a Ciudad Juárez.
Continúa durante 1970 trabajando en los centros nocturnos, pero a insistencia de varias personas seguras de que triunfaría en México, decide regresar a la capital y probar suerte por última vez. Al llegar al Distrito federal, por falta de dinero, tuvo que dormir en la Estación de Ferrocarriles, en la Terminal de Autobuses, en la Alameda Central y en la Villa de Guadalupe. Es llevado a la cárcel acusado de robo, episodio que sería plasmado en la película Es mi vida. Mientras estaba encarcelado injustamente compone canciones de protesta y poemas que no ha querido grabar. También surgen temas como No tengo dinero, Me he quedado solo, Tres claveles y un rosal, La más querida e Iremos de la mano. La tortura de la privación de su libertad se prolonga año y medio.
Lucha Villa es quien le prestó dinero para comer y para dormir en uno de sus tantos viajes al Distrito Federal, cuando más lo necesitaba. Adoptó el nombre artístico de JUAN GABRIEL; Juan en agradecimiento al viejecito que le enseñó a trabajar, mismo que lo aconsejaba cuando estuvo internado, y Gabriel en memoria de su padre.
1971. Gracias a sus canciones conoce a Andrés Puentes Vargas, director de Lecumberri, y a su esposa Ofelia Urtusástegui; el primero le presenta a La prieta linda y la segunda encuentra que no había pruebas suficientes para que permaneciera encerrado.
Junio 11 de 1971, Raúl del Valle y Enrique Okamura le ofrecen integrarse a las filas de RCA Victor en donde firmó contrato e inició la grabación de su primer disco, Un alma joven, en donde incluye su primer gran éxito No tengo dinero. Queta Jiménez La prieta linda también le tiende la mano y se convierte en su primer intérprete cuando graba Noche a noche. Posteriormente, Roberto Jordán interpreta No se ha dado cuenta y Estelita Núñez Extraño tus ojos. Con los temas No tengo dinero, Me he quedado solo, La más querida y Por las mañanas llevó a cabo su primera presentación profesional en Caracas, Venezuela, en el programa Él y ella de Radiocaracas Televisión, bajo la conducción de Mirla Castellanos y Miguel Ángel. Primera vez que subía a un avión en plan promocional; viajó por Valencia, Maracaibo, Puerto La Cruz y Maracay. Trabajó en Caracas en el programa De fiesta en Venevisión. Participa en el programa Estrellas musicales con Jesús Acosta, productor en Canal 8 del entonces Televicentro.
En ese año recibe su primer Disco de Oro. Participa en el Festival OTI ‘72 con Será mañana y Uno, dos y tres y me das un beso, mismas que aunque no calificaron, se colocaron en los primeros lugares de popularidad y fueron grabadas en un disco. Acompaña a José Alfredo Jiménez a su homenaje por 25 años como compositor en Dolores Hidalgo, Guanajuato.
Grandes figuras de la canción interpretan y convierten en éxito sus temas Por creer en ti con Estrellita; Cuando me vaya de tu lado con Mónica Igual y Que vuelvas con Enrique Guzmán.
Biografía: SACM